No hay escapatoria...

Lo mires por donde lo mires...

...o te escondas donde te escondas...

¡ya está aquí!

Una melé muy fresca

Me encanta ese momento del fin de semana en el que uno decide no hacer nada salvo tirarse en el sofá y poner la tele para ver algo que no te interesa en absoluto (como echo de menos esto, ahora que trabajo los fines de semana...). Es en estos momentos en los que he cogido el gustillo a ver un deporte en concreto: el rugby. Pues ya ves, empecé a verlo por pasar el tiempo hasta que me empezó a entretener. Así que el sábado por la mañana fui con Alonso a ver un partido de rugby en directo, más concretamente al Getafe. Ese mundo tan masculino y rudo, con esos nombres que se ponen... Estuvo muy gracioso. Sólo unos apuntes: 1) Las normas aún tengo que estudiármelas más y con ejemplos, 3) el césped hay que apañarlo de vez en cuando y 2) cuerpos como los de algunos jugadores de la selección francesa, vi más bien pocos XD

Dibujando

Hace muchísimo tiempo que no me sentaba a dibujar y hoy por casualidad, recogiendo la habitación, me he topado con mis lápices y mis dibujos. Antes en cuanto tenía un rato libre me relajaba mucho dibujando, cualquier cosa, desde la portada de un cómic a una de mis deportivas de baloncesto (a las pruebas me remito). Durante 3 meses estuve en una academia de dibujo con la idea de irme preparando para las pruebas de Bellas Artes (una de las muchas carreras que tenía en mente por aquel entonces), pero se me hacía muy pesado estar horas delante de un jarrón. La diferencia y la motivación estaba en hacerlo como hobbie o por obligación, asi que lo dejé para seguir haciéndolo como hobbie. De lo cual, y aunque nunca es tarde, algo me arrepiento.

Esta tarde me he vuelto a manchar las manos con mi carboncillo y, como siempre, se me ha pasado el tiempo volando...

De túnel a túnel y tiro porque me toca...

Así está siendo el día de hoy. Esta mañana he tenido que ir a Moncloa para hacerme un TAC de las rodillas, prueba, por cierto, no muy agradable para los/as que tenemos problemas en la rótula ¡qué grima me ha dado! A parte de lo ridículo que resulta esperar en bragas a que te atiendan. El caso es que tanto para ir como para volver a mi casa, tengo que ir por los túneles de la m30, esa obra tan maravillosamente claustrofóbica de la que algunos/as se siente orgullosos. En la vuelta he estado al punto de la desesperación, te pasas una salida y ólvidate porque empiezan metros y metros de túnel hasta la próxima que te sorprende casi a la altura del aeropuerto, lo que signfica en dirección contraria a mi casa. Y si a esto se le añade que la he cogido dos veces mal... El resultado es un cabreo que no veas. He venido con la impresión de vivir en una ratonera.