¡SE ACABÓ!

Pues sí, se acabó... por fín voy a poder hacer mi trabajo en condiciones con las ventajas de no tener que "aguantar" a los peques tanto como antes y siempre que quiera podré asomarme a darles achuchones (que he de decir que me encantan...). Así que ahora podré disfrutar de mi trabajo haciendo funciones que no me corresponden, pasando mil horas en una oficina bastante fea y soportando a algunas madres insoportables. Ventajas pues... que la oficina tiene aire acondicionado y los achuchones de los niños. Conclusión pues... que no se si estoy mejor fuera o dentro. Aún así estoy contenta, porque con sus pros y contras, he conseguido lo que quería. Sin más... me alegro de cada uno de los momentos que he pasado con mis mochuelos, 4 horas al día, de lunes a viernes, durante 9 meses.