domingo, 19 de noviembre de 2006

12 HORAS...



...y practicamente sin parar. Tanto derecho de los niños/as me consumió las energías, desde las 10 de la mañana hasta las 22 horas de la noche y por supuesto rechazando las ofertas de salir por la noche una vez terminado todo. Lo máximo que pudimos hacer mi compi y yo, fue ir a cenar un kebab, unos pastelitos y un te. Y por supuesto dormir como niños, que después de tantas horas trabajando por ellos/as, nos lo merecimos.
El resumen del día fue: frío, dolor de riñones, de rodillas, de cabeza y algún pinchazo que otro cosiendo las maravillosas carteras de cómic. Eso sí, acompañado de reencuentros, risas y alguna sorpresa inesperada como por ejemplo pasar un ratito con el "mochuelo original" ;) ¡Qué recuerdos!

1 comentario:

Alonso Sevillano dijo...

Mañonco mañonco!!!